La
comunicación entre el auditor líder y los miembros del equipo se suceden
alternamente, semejante a una conversación mano a mano, en la que se habla y se
escucha de un modo alternado. Si tenemos en cuenta la anterior dualidad de
papeles y responsabilidades, para que la comunicación del equipo tenga éxito en las discusiones objetivas se requieren condiciones en lo relativo al
equipo considerado en su conjunto, colaboradores en su carácter individual y el
auditor líder como árbitro.
Para
un mayor beneficio de la comunicación en las discusiones, las condiciones primordiales
que el equipo debe reunir son:
- Orden: No es rigidez protocolaria, sino que
se observe entre los miembros del equipo las reglas de mutua cortesía, que no
se interrumpan entre sí, observación a las normas establecidas y se sometan a
las reglas de juego.
- Cooperación: Los miembros del equipo en las discusiones han de distribuirse el tiempo disponible, para que todos tengan igualdad de oportunidades y no se intente el monopolio de la conversación.
- Compromiso: Muchas veces las discusiones del equipo no son para tomar decisiones, debe existir voluntad de compromiso representada por las reciprocas concesiones que se hagan los miembros del equipo, es la mejor forma de llegar a un acuerdo.
- Utilidad: Solo cuando los colaboradores estén convencidos de que lo que se persigue es un objetivo útil, mantendrán el interés y el entusiasmo en el equipo.
Para
el colaborador participante en una
discusión constructiva de equipo, son requisitos esenciales los siguientes:
- Conocimientos:
Si el colaborador no tiene habilidades,
aptitudes o posee conocimientos bajos en ciertos temas, se verá impedido de
participar en las discusiones del
equipo, desviando su atención y
frustrando los objetivos que se
persiguen.
- Falta conocimientos de los restantes miembros del equipo: Permite valorar a nivel individual las intervenciones en el equipo y saber las verdaderas finalidades que persiguen en sus planteamientos.
- Atención a las discusiones de equipo: Seguir el hilo de todas las intervenciones para emitir la opinión que se juzgue más conveniente, evitando que surjan comentarios que se aparten del tema que se discute.
- Contribuciones valiosas a las discusiones del equipo: Se requiere que el colaborador desarrolle la habilidad de presentar ideas fuerza que ayuden a resolver problemas planteados en la discusión.
El
auditor líder como árbitro de las discusiones debe estar más documentado que los
miembros de su equipo y es conveniente que así sea. Para una buena comunicación
del equipo el arbitro debe:
- Estar Informado: Sobre el nivel de competencia de los colaboradores.
- Tener una actitud de Maestro: Sobre los temas de discusión del equipo.
- Adoptar aires de superioridad: Echando mano constantemente de su autoridad.
- Llevar la voz cantante: Sofocando las intervenciones y comentarios subjetivos de sus colaboradores.
- Evitar: Alusiones y discusiones personales.
- Imprimir ritmo de las discusiones del equipo: Ni demasiado lento, ni demasiado rápido.
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