Bienvenidos a mi blog

Profesional en Contaduria Pública – Universidad Central, Especialista en Ciencias Tributarias, Experto en Contabilidad Internacional y Modelo Contable Internacional NIC – NIIF, curso finanzas para los negocios con aplicaciones en Excel, Universidad Nacional de Colombia; con más de 20 años de experiencia en Revisoría Fiscal y auditorías integrales, lograda en entidades públicas, privadas y en firmas de auditoría nacionales e internacionales.

sábado, 30 de noviembre de 2013

EL AUDITOR Y LOS CONTRATOS DE CONSTRUCCIÓN



Los contratos de construcción  implican un largo proceso de producción que normalmente comprende varios periodos contables. El principal problema que se presenta al  contabilizar estos contratos es el prorrateo de los ingresos de actividades ordinarias y los costos que cada uno de ellos genera en los diferentes periodos contables de ejecución.

Un contrato de construcción es una transacción negociada, para la fabricación de un activo o un conjunto de activos, que están intrínsecamente relacionados entre sí o son interdependientes por su diseño, tecnología o función. La NIC 11 Contratos de Construcción  establece el tratamiento contable de los ingresos de actividades ordinarias y los costos relacionados con los contratos de construcción. El auditor debe tener en cuenta que esta norma no aplica solamente para tareas de construcción en el sentido estricto de construcción de obras civiles, es decir, edificios; también aplica  para la construcción de activos completos como de componentes que se van usar en el activo más grande, es decir,  a la medida del interesado, esto es, por ejemplo la construcción de componentes de un cohete, que se esté diseñado solamente para un cliente.

La NIC 11  requiere que los ingresos y gastos del contrato se reconozcan de acuerdo con el porcentaje de realización del contrato, esto es, comparar los ingresos ordinarios originados del contrato con los costos del mismo incurridos en la consecución del estado de ejecución en que se encuentre, obteniendo de esta forma el valor de los ingresos ordinarios, los costos y gastos y los resultados que puedan ser asignados a la parte de contrato ejecutado. Por ejemplo si se programa una construcción a 2 años, el valor del contrato total es de 2.000 y el costo estimado del contratista es de 1.500, costos incurridos en el primer año 600, el segundo 900. Para el primer año el grado de avance de obra es del 40%, reconociendo como ingresos 800, costos 600, utilidad 200; para el segundo el grado de avance es del 100%, reconociendo como ingresos 1200, costos 900 y una utilidad de 300.

La norma no especifica con carácter obligatorio la utilización de un método para determinar el grado de porcentaje de realización. La empresa puede utilizar el que más considere adecuado, es decir, utilizar un método basado en insumos, producto o  naturaleza del contrato, esto es, -inspección del trabajo realizado, determinación de un porcentaje físico del contrato total o porcentaje de costos del contrato incurridos en relación al total de costos del contrato estimado-.


El auditor debe tener en  cuenta que la facturación no es una valoración adecuada para el reconocimiento de ingresos ordinarios, ya que dicho reconocimiento de ingresos ordinarios obliga a mostrar el porcentaje real de realización, mientras que la facturación no refleja la situación real del trabajo.

miércoles, 20 de noviembre de 2013

21 CARACTERISTICAS DE LA PRESENTACIÓN DE UN INFORME DE AUDITORIA





1
Claridad
Expresar las ideas de forma sencilla, legible y entendible para quien lea.
2
Confiabilidad
Confianza y fiabilidad que se le da a la información que reporta el auditor.
3
Propiedad
Uso correcto de las palabras para construir frases.
4
Brevedad
Expresar las ideas y conceptos con el menor número de palabras.
5
Sencillez
Expresar con naturalidad las ideas y conceptos.
6
Oportuno
Es cuando el auditor dice o hace lo necesario, justo en el momento que se requiere
7
Conexión
Nexo lógico de pruebas y procedimientos para llegar a las conclusiones con respecto a lo que reporta el informe.
8
Tono y Fuerza
La fuerza que el auditor le da a lo que esta reportando.
9
Precisión
Redactar el informe utilizando sólo conceptos completos sin agregar datos innecesarios.
10
Exactitud
Narrar los hechos tal y como se presentaron.
11
Coherencia
Lo que se este reportando corresponda con lo que en realidad este sucediendo.
12
Positividad
No utilizar frases negativas, es decir iniciar con la palabra NO.
13
Sintaxis
Correcta construcción de frases y oraciones.
14
Imparcialidad
Actuar de forma equitativa en el cumplimiento del trabajo, tratando de ser justo, honesto y razonable.
15
Objetividad
Descripción de ideas y conceptos apegadas a la realidad de lo que ve el auditor.
16
Familiaridad
Se debe redactar el informe en un lenguaje que sea familiar para quien lo vaya a leer.
17
Veracidad
Credibilidad entre lo que se reporte y lo que se revisa.
18
Efectividad
Saber expresar palabras simples lo que se quiere informar.
19
Coloquial
Utilizar un estilo de redacción cotidiano, no literario.
20
Variedad
El informe de auditoria no debe ser monótono ni aburrido.
21
Útil
La lectura del informe debe ser útil y ágil de tal forma que se entienda de inmediato lo que el auditor quiere decir.

ES IMPORTANTE UTILIZAR UN LENGUAJE COLOQUIAL EN LOS INFORMES DE AUDITORIA




Todos los profesionales de contabilidad vivimos en  un mundo de escritos e informes y no saber movernos en él acarrea  altos riesgos y costos. En la actualidad algunos especialistas en auditoria  y revisoría fiscal poseen falencias en cuanto a capacidades de lectura crítica y escritura de textos que van desde los más sencillos escritos como un  correo electrónico  hasta los más complejos  como informes de auditoria.

El informe  es el producto final de la auditoria donde  se presentan los resultados obtenidos durante el examen  y se comunica por escrito las desviaciones y la opinión  que emite el auditor revelando los problemas encontrados durante la revisión de las actividades operacionales  o cualquier otra circunstancia impracticable que tenga que reportar. Por otro lado indica las causas que originan esos ambientes y las posibles sugerencias para solucionar los problemas encontrados. Aunque, el auditor no solamente informa hallazgos negativos, sino también cualquier otra situación positiva que favorezca el desarrollo del objeto social, es decir,  reporta las buenas prácticas que encuentre y los aciertos en las operaciones.

En el  ambiente de la auditoria es muy común utilizar términos que solamente entienden los profesionales de contabilidad, por lo general, el informe final de auditoría está dirigido a los directivos de alto nivel de la entidad, los cuales pocas veces entienden  el complejo  lenguaje contable. Por esta razón se debe redactar informes ejecutivos con un lenguaje coloquial evitando el exceso de  términos contables o desconocidos. Cuando un informe de auditoría  no es claro, su lectura es incomprensible y el auditado simulará no entenderlo para así minimizar el peso del examen.

Un informe de auditoría es fruto de un proceso. Además de ser oportuno, confiable y claro se debe redactar con un estilo impersonal evitando: un tono impositivo e imperativo en las observaciones reportadas, un acento de regaño o menosprecio,  abundancia de literatura que solo hace difícil su lectura, repetir las situaciones que reporta y  sobreinformación que aumenta el volumen del dictamen. Esto no significa que se deba hacer un informe sencillo o carente de información.  El informe ejecutivo debe ser tan preciso y evidente que las observaciones realizadas se acepten de inmediato y sin necesidad de hacer aclaraciones.

Al redactar las desviaciones se debe hacer una descripción ajustada a la realidad de lo que se observo, de lo que se evidencio por medio de la evaluación, con el propósito de escribir los hallazgos  tal y como se presentan, describiendo los resultados de la auditoria lo más natural posible. Esto es, sin  hacer ninguna interpretación subjetiva del hecho que se audita, sino informar tal y como se presenta  la situación.

La escritura se halla fuertemente ligada con la formación profesional del auditor y su participación en la vida social. La escritura es un acto complejo que exige de quien escribe una buena estructuración del pensamiento y del mundo de las ideas. Cuando el auditor  escribe un informe debe tener una visión global de lo que quiere decir. Más tarde el auditado debe reconstruir el mensaje del informe y juzgar la coherencia alcanzada. En otras palabras, el auditor que redacta el informe se esfuerza durante el desarrollo de su actividad por organizar sus ideas de modo que el auditado pueda comprenderlas, observando lo que se ha informado e intenta determinar cómo se organizaron las ideas que se presentan en el dictamen.

El auditor debe tener en cuenta que los auditados y demás usuarios no van a tenerlo a él presente permanentemente para que explique el informe. De manera que si el especialista en auditoria no usa adecuadamente el lenguaje y organiza coherentemente sus observaciones su texto resultara impreciso. La coherencia y la cohesión del informe son dos propiedades fundamentales que cumplen una función esencial de comunicar. Son  dos propiedades estrechamente ligadas y en ocasiones  es difícil de establecer una línea divisoria entre ambas, pues en un informe si sus unidades lingüísticas no están cohesionadas, es difícil que el dictamen sea coherente. Redactar informes de auditoría o cualquier otro texto exige esfuerzo, dedicación, disciplina y mucha lectura. Lo importante no es cuánta superinteligencia tenga el auditor, sino como la emplea.

Hay magia en el pensar en grande...

miércoles, 6 de noviembre de 2013

LOS AUDITORES, EL VALOR DE USO Y LA NIC 36


La Norma Internacional de contabilidad 36 Deterioro del valor de los activos define el valor de uso como el valor actual del total de flujos futuros de efectivo que se espera recibir por la utilización continuada de un activo o UGE –Unidad  Generadora de Efectivo, como por su enajenación o disposición por otra vía al final. El valor de uso aplica a todos los activos que se esperan mantener a largo plazo tales como propiedad, planta y equipo.
Para el cálculo del valor actual se utiliza en primer lugar el concepto del valor del dinero en el tiempo. Para entender este concepto considerado uno de los más importantes en las finanzas, debemos entender que no es lo mismo recibir $5 dentro de un año que recibirlo hoy. Indiscutiblemente  no.  La inflación es el fenómeno económico que hace que el dinero día a día pierda su poder adquisitivo. Dentro de un año se recibirá los mismos $5 pero con menor poder de compra, ya que la inflación le ha quitado una buena parte de su poder de adquisición y se ha perdido la  oportunidad de invertir esos $5 en otra actividad.
En segundo lugar se requiere el concepto de tasa de descuento o costo de capital que refleja el riesgo implícito que se debe asumir  al realizar inversiones. Al determinar el valor de uso, los flujos de efectivo futuros proyectados se descuentan utilizando un tipo de descuento antes de impuestos que refleja las evaluaciones del mercado actuales del valor temporal del dinero y los riesgos específicos del activo o UGE. El tipo de descuento se basa en el rendimiento que exigirían los inversores si tuviesen que elegir una inversión  que genere flujos de efectivo de importes, plazo y perfil de riesgo equivalentes a los del activo o unidad generadora de efectivo.
Los flujos de efectivo futuros incorporan los ingresos estimados que se esperan originen los activos en el resto de su vida útil,  disminuidos por los costos y gastos atribuibles a estos   activos expresados en valor presente en fecha de los estados financieros. Una vez determinado el valor uso, este se compara con los valores actualizados de los activos, con el fin de determinar los ajustes a las  respectivas cuentas. Estos cálculos se realizan solamente cuando hay indicios de deterioro de los activos y su cálculo es responsabilidad de la gerencia, quien aporta evidencia objetiva del procedimiento de  cálculo a los auditores.
Se consideran indicios de deterioro de los activos cuando por ejemplo: analizada la información financiera y operaciones de la entidad gerencia concluye que se ha  producido un deterioro en el valor de los activos, la   capacidad instalada no se esta utilizando apropiadamente, hay problemas de obsolescencia tecnológica,  existen pérdidas en operación por depreciaciones elevadas de propiedad, planta y equipo,   etcétera. En estos casos la administración debe determinar el valor de uso de estos activos que estén vinculados con la generación de ingresos. Las consecuencias del deterioro de los activos determinado a través del valor de uso deben ser revelados en notas a los estados financieros.

El auditor  al evaluar  los  cálculos del valor uso se enfrenta a problemas tales como:  Falta personal capacitado en la entidad y la firma,  ausencia de un manual políticas de cálculo, incertidumbre en la estimación de los flujos de efectivo futuros, falta de información para determinar la tasa de descuento, falta de revelación del deterioro en los estados financieros cuando la cifra es insignificante,  desconocimiento sobre la NIC 36 y  negación  de algunos  administradores a disminuir el valor de sus activos por táctica económica y financiera.

Calcular y revelar en las notas a los estados financieros el deterioro del valor de los activos cuando hay  indicios  de deterioro de los activos es un requerimiento de la NIC 36 y un elemento clave para la auditoria en cuanto a evidencia. El contenido de la información en los estados financieros es que sea útil a una amplia gama de usuarios que se basan en ella para la toma de sus decisiones económicas. Para alcanzar este objetivo de utilidad en la preparación y presentación de información financiera se debe cumplir una serie de requisitos o características cualitativas que conducen a que la información contenida en los estados financieros refleje la imagen fiel de la situación financiera, del resultado y de los cambios en los flujos de efectivo de la empresa.

LA VALORIZACIÓN DEL CAPITAL INTELECTUAL Y LA NIC 38

Hoy en día la contabilidad tradicional sigue clasificando a los trabajadores en las cuentas de ganancias y pérdidas como un gasto y la maquinaria de producción se presenta en el balance como una inversión. Existe la creencia capitalista que los principales impulsores de la prosperidad económica de una entidad son las máquinas  y el capital.Además, se considera que el personal de la empresa es necesario pero es reemplazable, es decir, se puede cambiar sin más transcendencia.
Actualmente muchos financieros valorizan las empresas teniendo en cuenta únicamente el rubro de  activos tangibles- terrenos, edificios, maquinaria y equipo, etcétera- que determinan el valor en libros, sin incluir el capital intelectual, esto es, los conocimientos humanos, el saber, el hacer, las competencias del personal, las experiencias y tecnología,  que sumados al valor en libros determinan el valor de mercado.
El capital intelectual es el concepto más complejo de medir en economía y finanzas, ya que existen pocos indicadores de medición y gestión de los activos intangibles. Los recursos intangibles son fuentes que generan riqueza. La capacidad de medir y gestionar estos activos  es esencialpara poder explicar favorablementelas técnicas de obtención de ventajas  competitivas en el mercado.
La  Norma Internacional de contabilidad 38 Activos intangibles  requiere que el capital intelectual como activo intangible se valore teniendo en cuenta que el activo proporcione beneficios económicos futuros y que su valor se pueda estimar en forma fácil. Por otro lado se debe analizar dos fases importantes: 1.-La fase de investigación en la cual no se reconocen activos intangibles surgidos de investigación o de la fase de investigación, en caso de proyecto interno, ya que se debe reconocer como gastos del periodo en el que se incurran 2.- La fase de desarrollo donde el activo surgido debe ser reconocido solo si la entidad puede demostrar su capacidad de utilizar o vender un activo intangible, demostrar que técnicamente se puede completar la producción del activo intangible de forma que pueda estar disponible para su utilización y su capacidad para evaluar de forma fiable, el gasto atribuible el activo intangible durante su desarrollo.
El costo de un activo generado internamente incluye todos los desembolsos de las actividades de crear, producir y preparar el activo para su uso, siempre que sea atribuido directamente ose distribuya en forma razonable.
A nivel de empresa el sistema contable de muchos países en vía de desarrollo reportan resultados de actuaciones históricas, dejando de lado el enfoque para la cuantificación y administración de los activos intangibles y generar una visión del potencial de ingresos para la entidad.
Muchas entidades  presumen  tener capital intelectual, una invención, marca o diseño industrial, pero esta no vale nada hasta tanto no aparezca el comprador que le dé su verdadero valor. La creación de capital intelectual se da en economías de alto nivel de investigación, desarrollo y de creatividad, donde este rubro marca la diferencia con la competencia y logra sostenibilidad y  progreso de la organización.
El capital intelectual debe ser adquirido o formado mediante procesos que impliquen erogaciones de efectivo. Los estimados no tienen fundamento legal en la contabilidad nacional e  internacional.

martes, 30 de julio de 2013

JERARQUÍA DEL CALCULO DEL VALOR RAZONABLE DE MAYOR A MENOR OBJETIVIDAD

La  NIIF 13 -Medición del valor razonable-, establece los elementos que permiten que dicho valor  sea  comparable y consistente, además,  requiere que su cálculo se realice con base en variables objetivas y observables, en caso de su ausencia, como por ejemplo que no exista  un precio en el mercado para transacciones similares,  esté la posibilidad de tomar en cuenta otras variables denominadas no observables.

La jerarquía consiste en tres niveles, en primer lugar se clasifican precios cotizados en mercados activos-principal o más ventajoso-, en fecha de medición y posible para la empresa realizar transacción. En segunda instancia, se catalogan los precios cotizados en mercados activos, diferentes a los del nivel 1, disponibles en el mercado pero viables para la entidad; precios cotizados en mercados no activos y variables diferentes a precios cotizados tales como tasas de interés, curvas de rendimiento y volatilidades supuestas. Finalmente esta el nivel 3 que corresponde a variables no observables que reflejen los supuestos que se utilizarían en el mercado para establecer un precio, por ejemplo datos de la propia entidad ajustados por algunas técnicas de valoración.


 En conclusión, la jerarquía del  cálculo  del valor razonable de activos y pasivos de mayor a menor objetividad,  se puede obtener mediante la  verificación de un mercado activo o similar, flujo de caja descontable, modelos económicos de valor, valoración de un experto, costo de adquisición, costo calculado subjetivo, costo de reemplazo depreciado o método de índice de precios. Mayor riesgo para el auditor cuando mayor es la complejidad e incertidumbre de las estimaciones.

sábado, 27 de julio de 2013

Riesgos del Auditor Frente a las Estimaciones Contables del Valor Razonable

La contabilidad habitualmente se expresa en términos monetarios, por lo cual, una vez identificados los hechos económicos, se traducen en unidad de medida. Valorar activos y pasivos de acuerdo al modelo NIIF requiere calcular en unidades monetarias el efecto financiero de los diferentes hechos económicos y contables. 

Estas cuantificaciones piden elegir criterios de valoración alternativos o recurrir a métodos estimativos, por lo que las cifras contables no están libres de ser interpretadas con un cierto grado de subjetividad.

La Norma Internacional de Auditoria –NIA- 540 establece pautas y provee lineamientos sobre la auditoria de las estimaciones contables contenidas en los estados financieros. Define las estimaciones contables como una aproximación al monto de una partida en ausencia de un medio preciso de medición. El proceso de estimaciones implica la utilización de juicios basados en la información contable fiable disponible más reciente, en consecuencia, su existencia no debe afectar de ningún modo la fiabilidad de la información financiera.

De acuerdo con el estándar el auditor debe obtener evidencia suficiente apropiada de auditoria sobre si una estimación contable es razonable en las circunstancias y, cuando se requiera, si es revelada en forma apropiada. La evidencia disponible para soportar una estimación contable será a menudo más difícil de obtener y menos concluyente que la evidencia disponible para soportar otras partidas en los estados financieros.

En contadas ocasiones el auditor está en condiciones de emitir un juicio técnico con absoluta certeza sobre la validez del valor razonable de ciertas cifras contenidas en los estados financieros. Esta falta de certeza genera el concepto de riesgo de auditoria, como resultado de la combinación de aspectos aplicables exclusivamente a la actividad de la entidad, independientemente de los sistemas de control desarrollados, aspectos atribuibles a los sistemas de control y los relacionados con la naturaleza, alcance y oportunidad de los procedimientos de auditoria de un determinado trabajo.

Los objetivos y principios generales que gobiernan una auditoria de estados financieros se establecen en la Norma Internacional de Auditoria- NIA- 200, párrafo 23, definiendo el riesgo de auditoria como la posibilidad de que el auditor exprese una opinión de auditoria inapropiada cuando los estados financieros están presentados erróneamente. La norma considera el riesgo de auditoria de informe inadecuado a través de la sus tres componentes: riesgo inherente, de control y de detección. Además el riesgo de auditoria está vinculado con el riesgo general del negocio, ya que su actividad está relacionada con un mercado de capitales donde prima la inestabilidad e incertidumbre como variables.

Valor razonable y riesgos potenciales-inherente, de control y detección- van de la mano, la probabilidad de que la estimación del valor razonable de una cifra o una transacción sea errónea de forma significativa, es un riesgo adicional que el auditor debe asumir y evaluarlo ya que la exactitud de las cifras depende de la investigación exhaustiva del sector donde opera la entidad, método de valoración aplicado, complejidad de las operaciones, grado de subjetividad contenido en los cálculos, transacciones inusuales y complejas en periodos próximos al cierre de ejercicio y procedimientos no habituales del sector.

Para auditar el nuevo modelo de contabilidad basado en estimaciones se requiere examinar todas las valoraciones realizadas con posterioridad y modificar fundamentalmente los procedimientos de auditoria para la verificación y monitoreo de los procedimiento a seguir para el cálculo de valor razonable, selección de método más apropiado para el cómputo del valor razonable, identificación bases sobre las que se realizan hipótesis significativas sobre ciertas circunstancias y hechos, revelación de juicios hechos al aplicar las políticas contables si tienen efecto significativo en los estados financieros, revelación de hipótesis claves acerca del futuro, que puedan afectar el valor de activos y pasivos dentro del ejercicio futuro, verificación del cumplimiento del marco conceptual y normatividad de la jurisdicción.

Las diferencias entre las estimaciones efectuadas por la entidad y las que realice el auditor, tal vez, puedan producir diferencias relevantes que ameritan salvedades, opinión positiva o negativa, o párrafo de énfasis. Un buen gobierno corporativo, administración de riesgos y una correcta aplicación de las normas de aseguramiento son claves para fiabilidad y transparencia de la información financiera.

Diseñar un Manual de Políticas Contables IFRS-NIIF es el Primer Paso para el Aseguramiento y Control Interno de Información Financiera

Las políticas contables  de acuerdo con los estándares internacionales  son  principios específicos, métodos, bases, acuerdos y procedimientos adoptados por una empresa para la preparación y  presentación de sus estados financieros IFRS-NIIF, auditados según NIA-IAS y control interno COSO, que ponen en funcionamiento las buenas prácticas contables y económicas para la divulgación de información contable con propósitos generales.

Diseñar previamente el manual de políticas contables IFRS-NIIF es el  primer paso  para el aseguramiento y  control de información financiera. El auditor debe tener en cuenta que las NIIF tratan requerimientos de reconocimiento, medición, presentación y revelación de partidas y elementos de los estados financieros. Estos conceptos deben ser verificados por el auditor e  incluidos  en un manual de políticas contables IFRS-NIIF a través de capítulos así:
  1. Bases para preparación de estados financieros. Políticas contables, reseña técnica, definiciones etcétera ;
  2. Adopción de las normas internacionales de contabilidad, base normativa y legal, versión NIIF a utilizar, fechas adopción, base técnica, definiciones, aplicación repetida NIIF 1 etcétera;
  3. Moneda funcional y transacciones en moneda extranjera, definiciones,  técnica etcétera;
  4. Efectivo y equivalentes al efectivo;
  5. Otros activos financieros;
  6. Cuentas por cobrar comerciales y otros préstamos;
  7. Activos biológicos y productos agrícolas;
  8. Otras cuentas por cobrar;
  9. Cuentas por cobrar a entidades relacionadas;
  10. Inversiones permanentes en instrumentos de patrimonio; subsidiarias, asociadas y negocios conjuntos;
  11. Inventarios;
  12. Propiedad, planta y equipo;
  13. Activos intangibles;
  14. Activos intangibles distintos de goodwill;
  15. Deterioro al valor de los activos;
  16. Otros pasivos financieros;
  17. Cuentas por pagar comerciales;
  18. Otras cuentas por pagar;
  19. Cuentas por pagar a entidades relacionadas;
  20. Pasivos por impuestos a las ganancias corrientes y  diferidos;
  21. Provisiones
  22. Provisiones por beneficios a empleados;
  23. Pasivos no financieros;
  24. Capital;
  25. Dividendos;
  26. Clasificación de activos y pasivos en corrientes y no corrientes;
  27. Ingresos; y
  28. Costos y gastos.
En efecto, para implementar con éxito los estándares internacionales se necesita disciplina, perseverancia, honradez y buen juicio profesional, se requieren administradores, contadores y auditores proactivos. Vivir de modo proactivo es actuar de acuerdo a prioridades que hemos establecido previamente. 

El Auditor y la Aritmética Financiera

Con la adopción, incorporación e implementación  del nuevo modelo contable NIC-NIIF los auditores  deberán aprender el oculto lenguaje de los negocios y las finanzas, e ir más allá de las tareas repetitivas de verificación y comprobación de cifras débito, crédito, tendencias y variaciones.

El valor de dinero en el tiempo es el concepto que más se utiliza en el tema de valoración de activos, pasivos y presupuestos, es decir, los nuevos criterios de medición como el  valor razonable o de mercado, el valor actual, valor realizable, valor de uso, deterioro del valor y costo de  amortización.

Los estándares internacionales  NIC-NIIF  exigen la  aplicación   del principio de imagen fiel y  criterios de transparencia  para los valores de activos y pasivos de la entidad. El cálculo de estos importes es bastante complejo y por esta razón se requiere de conocimiento de negocios, de aritmética financiera, capacidad de análisis y muestra de sentido común. El auditor deberá dominar algunos conceptos financieros básicos tales como:

1.   Valor de dinero en el tiempo, esto es, no es lo mismo recibir hoy $100 que recibirlos dentro de un año por la pérdida del poder adquisitivo y costos de oportunidad;

2.   Cálculo del valor actual o presente;

3.   Cálculo de la tasa efectiva;

4.   Cálculos de cuotas de préstamos y arrendamientos;

5.   Tablas de amortización;

6.   Ciclo normal de operación con el fin de clasificar los activos y pasivos en corrientes y no corrientes;

7.   Riesgo de crédito, intereses y de tipo de cambio;

8.   Valoración de empresas con el fin determinar deterioro de los activos larga duración;

9.   Presupuestos;

10.     Instrumentos financieros derivados

11.     Valor residual de activos fijos

12.     Medición de costos de amortización a través de intereses; y

13.     Métodos de cálculo de valor razonable: precio comparable, costo de   reposición y rendimiento.

14.     Otros: WACC o costo promedio ponderado de capital, flujos de caja   descontados, etc.
 

El cambio esencial del modelo PCGA a NIC-NIIF,  no está en la mecánica  de registros contables para generar estados financieros de apertura o  los primeros estados financieros NIC-NIIF en hojas de Excel. Se pretende  es presentar y revelar  estados financieros de la situación financiera, el resultado y los cambios en los flujos de efectivo que hayan sido elaborados mediante los diversos criterios financieros, utilizando herramientas financieras para  el reconocimiento, medición inicial y subsiguiente  que permitan interpretar de forma correcta la realidad de la empresa y así decir que dichos estados muestran la imagen fiel y valor razonable de los activos y pasivos.

Uno de los grandes retos de los auditores y gerentes en la actualidad es la correcta aplicación del valor razonable mediante la utilización de aritmética  financiera, por consiguiente,  sino se aplican correctamente estos criterios de reconocimiento y medición inicial y subsiguiente que la norma requiere, los estados financieros no se estarían presentando razonablemente y quedarían sujetos a un dictamen del auditor con salvedades, perjudicando a los inversionistas de la entidad ya que se verían obligados a vender sus acciones  porque la información financiera no es fiable.


La aplicación de los estándares internacionales exigen un gran esfuerzo a las entidades y auditores, ya que se está pasando de un modelo patrimonialista basado en solvencia y liquidez a un modelo capitalista concentrado en la transacciones de inversión y especulación, con normas contables internacionales que tienen efectos económicos, se relacionan con la confianza pública, el control la información, existen diferentes tipos de decisiones financieras y económicas que se toman con base en la información contable y se visualiza un cambio de la lógica económica en la financiación.

Cinco Aspectos Clave al Calcular los Honorarios en una Firma de Contadores Públicosd

Se definen los honorarios como la compensación por los servicios profesionales que prestan los Contadores Públicos u otros profesionales.

Los ingresos de una firma se basan en la estimación, cotización y cobro de honorarios que finalmente repercuten en la facturación.



La fijación de honorarios efectuada empíricamente, es común en las medianas y pequeñas firmas. Normalmente se califica al profesional de la Contaduría que no sabe cobrar sus honorarios, hay posibilidad de negociación o condiciones de pago, lo que no sucede con un médico, psicólogo, abogado o ingeniero civil, esto gracias al entorno del proceso de trabajo de estos profesionales.

El talón de Aquiles  del profesional de la Contaduría es fijar los honorarios justos y el pago oportuno por parte de los clientes.
Cálculo de honorarios.
Para realizar un cálculo y estimación de honorarios se deben tener en cuenta los siguientes aspectos:

1.     Cuota por hora teniendo en cuenta la categoría del personal: socio, gerente, superior, senior etc.

2.     Característica del servicio que se va a prestar y grado de responsabilidad asumida.

3.     Habilidad y experiencia que debe tener el personal que se asigne a cada trabajo, a fin de que el servicio sea prestado eficientemente.
4.     Gastos generales de la firma.

5.     Margen de utilidad razonable en donde se pueda obtener:

·      Una utilidad razonable para los socios
·      Una mayor capacidad técnica y económica a los miembros de la firma.

·      Un servicio en el que no se sacrifique la calidad del trabajo, teniendo en mente el fin principal de la profesión, sin  descuidar el punto de vista negocio.

Consejos para las firmas de Contadores Públicos


Muchas veces las organizaciones  marchan  pedaleando improductivamente en una bicicleta estática de problemas, de criterios errados, de necesidades,  sin visualizar nuevos   caminos, nuevas alternativas que escoger o simplemente no están alineados con sus objetivos.
Los profesionales de la Contaduría íntegros están  preparados para responder  proactivamente a las necesidades y problemas de los clientes, ayudándolos   a tomar decisiones,  en caso contrario no estamos en posición de competir. Las personas toman el servicio de una firma  basados en lo que ven, escuchan y creen, sin embargo,  muchas veces no contratan  por falta de: necesidad, dinero, deseo, urgencia, o no tienen la suficiente confianza y confiabilidad. Somos producto de la elección  no de los genes, ni la educación, ni la cultura.
El siglo XXI es la  era de Conocimiento y  la información. Está caracterizada por la aparición de organizaciones donde la visión, imaginación y liderazgo no solo son estimulados, sino que han pasado hacer parte de capital intelectual y social de la empresa, una época  donde profesionales integrales  están creando e innovando sin necesidad de ser controlados y dirigidos.
Para las organizaciones líderes de hoy en día,  los trabajadores integrales, contablemente, ya no son un gasto, sino  una inversión. El modelo de la era industrial del “Garrote y Zanahoria”, del premio y castigo, de las reglas, controles y eficiencia quedo en el pasado. Terminó la era de administrar a las personas como si fueran herramientas de trabajo.
En algunas  firmas de auditoría  todavía  se escucha: El Acting Partner, es el que más sabe y toma todas las decisiones importantes, no hay necesidad de sugerir señor Gerente, ni ver el futuro, solo hay que hacer lo que le digan y seguir las reglas. Precisamente se elaboran procedimientos para que el trabajo se realice con eficiencia. No se puede confiar en el Senior, sin controles, pasarían pocas cosas buenas.
Si estamos decididos a crear  nuestra propia firma sigamos el consejo de Emerson que escribió: “Todos debemos aprender a detectar aquellas ideas que como rayos de luz nacen en el interior de nuestras mentes. Si no lo hacemos, corremos el peligro de que, el día de mañana, un perfecto extraño presente con mucha convicción y orgullo, la misma idea que nosotros ya habíamos venido acariciando por algún tiempo, y entonces nos vemos en la penosa necesidad de escuchar nuestra propia opinión de labios de otra persona.
El patrón común o mapa recomendado para hacer realidad una   idea es:
  1. Todas las organizaciones y profesionales  tienen  un propósito en la vida, un talento especial para ofrecer a los demás (Misión).
    Misión:
     Es la   combinación de  ese talento único con el servicio a los demás. Al crear una firma estamos buscando crear y mejorar la calidad de la Contaduría Pública.
  1. Todas las cosas se crean dos veces, primero mentalmente (visión, hábitos), luego físicamente (disciplina, pasión, conciencia).    
Visión: Es imaginación aplicada que relaciona posibilidad con: necesidad,  talento y pasión.
Hábitos: Es la repetición continua de una acción física, mental o emocional que condiciona el comportamiento humano. Un profesional es integro, cuando lo que hace, concuerda  con lo que piensa y siente. El carácter de una persona es la suma de sus hábitos, es decir son características  adquiridas. Las características innatas reciben el nombre de temperamento. La personalidad es la  suma de características que diferencian a los individuos (Temperamento y carácter). Es decir,  personalidad es la manera de ser de cada quien (como siento, pienso y actúo). Los elementos del  hábito son: Conocimiento (Que hacer cuando se presente un problema), Habilidad (Como hacerlo) y  Actitud (Porque hacerlo, querer hacerlo).
Disciplina: Es el sacrificio que se necesita para convertir esa visión en realidad y hacer lo que sea necesario para que ocurran las cosas.  La disciplina surge de la unión de la visión al compromiso.
Pasión: Es cuando el  servicio que se presta apasiona y se manifiesta en forma de entusiasmo, conexión emocional y determinación. La persona siente empatía y se convierte en parte de la solución del problema. Es el fuego que nos impulsa a prestar un  servicio.
Conciencia: Se relaciona con la ley moral y la conducta. Es una sensación de justicia y equidad al actuar. La conciencia gobierna en un proyecto la visión, disciplina y pasión. Es el modelo de valores que debe tener cada uno de los trabajadores integrales de la organización: Amabilidad, honestidad, cumplir promesas, expectativas positivas, lealtad con los ausentes, respecto, servicio y contribución.
Ser Proactivo: Es actuar de acuerdo con prioridades que hemos establecido previamente. El modo reactivo  como su nombre lo expresa es reaccionar a las situaciones únicamente hasta que aparezcan.
Plan estratégico: Es el que marca las directrices y comportamiento (roles y metas) de los miembros de una organización para que está alcance los objetivos plasmados en el plan general. Una vez fijados los objetivos, la firma se debe concentrarse en lo más importante, es decir lo que la firma  simplemente debe lograr, 

Hasta Pronto.