- Sea amable y atento con todas las personas.
- Una sonrisa agradable logra milagros.
- Reciba las visitas afablemente.
- El apretón de manos debe ser sincero y fuerte, nunca apático.
- Grabe en la memoria el nombre de las personas que se le presenten.
- Cuando hable con alguien mírelo a los ojos.
- Converse con seguridad y calma sin subir demasiado el tono de voz.
- Evite la chismografía y no se mezcle en asuntos privados o personales.
- Evite discusiones, manténgase sereno aunque lo provoquen.
- Cuando esté equivocado admítalo pronto y francamente.
- Sea razonable, tolerante y comprensivo.
- Ayude con prontitud y entusiasmo.
- Estimule siempre, alabe con generosidad, amoneste con tacto.
- Agradezca todos los favores, lo mismo pequeños que grandes.
- Cuando dé las gracias, hágalo expresivamente, no por pura cortesía.
- Sea optimista, nunca se lamente para que lo compadezcan.
- Procure no hacer esperar a nadie, sea siempre puntual.
- Haga que se respete su palabra, cumpliendo estrictamente todo lo que prometa.
- Sea íntegro, correcto, sincero y leal.
- Siéntase orgulloso no sólo de su trabajo sino también de su apariencia.
- Propóngase superar en su labor y en su conducta hoy y siempre.
- Irradie amistad; entusiasmo y buena voluntad.
- Cuide de su apariencia personal, vístase de acuerdo con la ocasión.
- Nunca lisonjee.
- Cada uno de nuestros actos define nuestra personalidad.
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